“ Un señuelo a tener en cuenta para los escenarios más exigentes ”
El señuelo:
El Buginu 140 de 28 gramos de peso de la marca Seaspin made in Italia, ha sido el señuelo al que se le pude poner a prueba en las salidas de pesca dándole esa oportunidad y así examinarlo con sus movimientos dentro de su medio el agua salada. Después de ver el video te puedes dar cuenta que realmente tiene un movimiento muy diferente a otros señuelos que anteriormente habían pasado esta prueba.
Buginu 140 cuando menos lo esperas hace unos quiebros muy atractivos para cualquier depredador que se encuentre en la cercanía.
Se puede decir que tiene una buena respuesta con tanta variación de movimientos.
Señuelos diseñados con la última tecnología y con ayuda de grandes pescadores, es la forma en la que esta marca fabrica sus señuelos, "por pescadores y para pescadores".
Comportamiento del Buginu 140 bajo el agua
Buginu 140 de la marca Seaspin, un señuelo que acepta cualquier escenario por muy difícil que este sea, Todavía no he tenido la oportunidad de probarlo con agua más tranquilas y creo que puede hasta funcionar hasta mejor, pudiéndolo traer funcionando con toda su movimiento enérgico hasta la misma orilla.
Su babero de última generación tipo "abanico"
El babero:
Señuelo Buginu 140 después de lanzar cae al agua en picado, se puede dejar hundir lentamente y entonces comenzar a darle vida bien con vueltas de manivela o simplemente a golpes de muñeca. El innovador babero tipo “abanico” es el encargado de darle esos movimientos muchas veces exagerados y dando unos quiebros extraños que lo hacen muy atractivo.
4 baberos del Buginu formando una cruz
La forma del babero es la que le da ese movimiento tan atractivo
Seaspin una nueva marca de señuelos especial lubinas made in Italia.
Gama de colores:
Para todos los gustos como casi todos los modelos marcas de prestigio, también hay colores más llamativos para esos escenarios que lo requieren, incluso en las fotos no se aprecia muy bien, pero algunos en su vientre están pintados con color, para llamar la atención de las lubinas que inician el ataque desde la profundidad.