1. FORMA Y ANATOMÍA EXTERNA:
Cola: Se corresponde con el extremo posterior del cuerpo e incluye el pedúnculo caudal, la aleta anal y la aleta caudal. Esta última puede presentar distintas formas, dependiendo de la especie de pez (heterocerca, protocerca, dificerca u homocerca como en nuestro ejemplo).
Morfología Interna de los peces
La morfología externa de los peces tiende a reflejar su modo de vida. La mayoría de los peces autóctonos andaluces tiene forma fusiforme o ahusada (trucha, bogas, cacho, barbo, etc.). Otras especies posen cuerpos deprimidos dorso-ventralmente (peces planos como la platija) o comprimidos lateralmente (carpín, carpa, etc.). Existen también formas cilíndricas, sagitadas, aciculiformes, etc.....
Para conocer las principales características de la anatomía externa de un pez dividiremos su cuerpo en tres zonas básicas: Cabeza, tronco y cola.
Cabeza: Esta delimitada por el borde posterior del opérculo branquial, y en ella se halla localizado el sistema nervioso central. La boca puede tener dientes mandibulares, como en salmónidos, lucio y perca americana, o carecer de ellos como sucede en ciprínidos. La forma y posición de la boca es muy variable y depende en gran medida de los hábitos alimenticios de cada especie. La boca de los esturiones es claramente ventral, mientras que en las bogas su posición es ínfera, casi ventral. Este tipo se da en especies que están adaptadas a la búsqueda de alimento sobre la superficie del fondo. El fartet posee la boca súpera, porque come en la superficie, la carpa o el carpín la tienen terminal. Cubiertas y protegidas por los opérculos se encuentran las branquias o agallas que son los órganos respiratorios de los peces. Están formadas por los arcos branquiales que son cartilaginosos. En ellos están insertas las laminillas rojas, en las cuales se produce el intercambio de oxígeno (O2) entre el agua y la sangre, por difusión simple.
Tronco: Está comprendido entre la cabeza y el orificio anal. En el se localizan los distintos tipos de aletas, que son las estructuras responsables del movimiento y de la estabilización de los peces en el agua. Hay dos grupos de aletas: Un grupo de aletas pares, las pectorales (torácicas) y las pélvicas (ventrales) (correspondientes a nuestros brazos y piernas), y otro de aletas impares, la dorsal, la anal y la caudal. El soporte de las aletas son lo radios que pueden ser rígidos, en cuyo caso se llaman espinas, o blandos. Son típicos radios duros los de la primera dorsal del black-bass (Micropterus salmoides representado en la imagen inferior) o el primer radio de la dorsal del barbo con sus pequeñas denticulaciones.
Veamos ahora la anatomía externa de un pez autóctono como lo es la trucha común (Salmo trutta).
Peculiaridades de los peces.
Aproximadamente en la zona media de ambos costados discurre una línea, más patente en unas especies que en otras denominada línea lateral. Está formada por una fila de escamas perforadas y su función es sensorial, capta ondas de movimiento en el agua, ondas de presión, provocadas por el movimiento de otros peces en el agua.
La suma de las longitudes de la cabeza, tronco y cola es la talla o longitud del pez. Existen varias formas de tomar esta medida, pero las más típicas son las que mostramos en esta saboga (Alosa fallax) que hemos tomado como modelo:
Longitud Total: (L.T.) hasta el punto más alejado de la boca.
Longitud Furcal: (L.F.) hasta el punto medio de la cola, la furca.
Longitud Estándar: (L.E.) hasta el final de las escamas o del pedúnculo caudal.
La piel de la mayoría de los peces está recubierta de escamas, pues en el mismo sitio donde a los mamíferos les nace el pelo o a las aves la pluma, en peces nace una pequeña plaquita ósea, transparente al principio, que va engrosando y volviéndose opaca con el tiempo, hasta proporcionar al pez una formidable coraza de protección formada por miles de pequeñas plaquitas, ante multitud de agentes, depredadores, traumatismos por golpes o raspaduras, infecciones por hongos o bacterias, etc.
Además, el estar recubierta de escamas facilita el desplazamiento en el agua realizando una función hidrodinámica. Las escamas se conservan a lo largo de toda la vida del pez y cuando alguna se desprende es sustituida por otra.
A grandes rasgos existen dos tipos de escamas:
· Escamas Ctenoideas: poseen unas pequeñas denticulaciones en el ápice y tienen forma de peineta española. La poseen peces más primitivos.
· Escamas Cicloideas: tienen forma de disco con el borde más o menos circular y liso, el margen descubierto de la escama no está dentado.
La mayoría de las escamas posee forma poligonal, casi de pentágono, excepto las de la carpa de espejos, que son irregulares.
Por lo general nuestros peces son poco llamativos, sus colores son discretos, muy adecuados para camuflarse y pasar desapercibidos. Algunas especies, fundamentalmente las alóctonas, poseen colores más llamativos, como la perca sol. Durante el periodo reproductivo, los machos de ciertas especies, desarrollan coloraciones algo más intensas, algunos incluso con transformaciones anatómicas, como es el caso de los tubérculos nupciales en machos de barbos, bogas, etc.
La anatomía interna de un pez está constituida por el esqueleto, la musculatura y los diferentes órganos y sistemas vitales del organismo vivo. Entre éstos destacan el tubo digestivo, las gónadas u órganos reproductivos, el corazón, hígado, riñón, vejiga natatoria o vesícula neumática, etc., que se alojan todos en la cavidad abdominal, en la porción inferior del cuerpo debajo de la columna vertebral. El digestivo es grande en peces herbívoros, y corto, simple y muy distensible en peces carnívoros.
El sexo en muchas especies de peces, es solo reconocible tras un examen de sus gónadas. Las gónadas femeninas u ovarios (huevas) presentan numerosos óvulos redondeados, distinguibles a simple vista, de color anaranjado o amarillento, mientras que las gónadas masculinas (testículos), de color blanquecino o pardo, es una masa lisa. Otros peces presentan un acusado dimorfismo sexual como en el caso de la gambusia (originaria de América del Norte).